El anciano se encontraba durmiendo cuando le despetó el ruido por la rotura de un cristal de su casa. En ese momento, cargó su escopeta de caza con dos cartuchos y salió al pasillo a ahuyentar a cuatro atracadores que se habían introducido en el domicilio .

Al ver que éstos no se amedrentaban, efectuó un disparo que alcanzó a A.R.B., un hombre de 63 años vecino del municipio de Cerceda con doce antecedentes penales.

A la vista de la agilidad demostrada por quien iba a ser su víctima, los otros tres atracadores recogieron a su compañero herido y uyeron por la misma ventana por la que habían entrado.

A pocos kilómetros del lugar del suceso los atracadores abandonaron en la cuneta al delincuente herido y llamaron al timbre de la casa más cercana, huyendo posteriormente.

Victoriano Liñares aseguró que su intención no era hacer daño a los ladrones y que "si se hubieran marchado cuando vieron la escopeta, juro por lo más sagrado que no le hubiera disparado", según publica "La Voz de Galicia".

A.R.B. fue trasladado al Hospital Xeral de Satiago, donde se le apreció una herida en una axila y fue sometido a una intervención quirúrgica. Según el parte médico, su pronóstico es reservado y se recupera favorablemente.