LOS ANALISTAS ESPERAN QUE OBAMA ADOPTE POSICIONES "AUDACES" Y "ARRIESGADAS" EN POLÍTICA EXTERIOR DURANTE 2009
- Pronostican una primera fase de mandato "prudente" para consolidar su credibilidad como líder
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Los analistas políticos esperan un mandato del nuevo presidente de EEUU, Barak Obama, que tomará posesión el próximo 20 de enero, "audaz" y "arriesgado" en política exterior aunque con una primera fase más "prudente" en la que consolidará su credibilidad como líder.
En dos artículos publicados por la revista TEMAS, recogidos por Servimedia, los expertos Gustavo Palomares y Robert Matthews consideran que el nuevo presidente norteamericano se mostrará cauto antes de adoptar posiciones "drásticamente" diferentes en política exterior.
Sin embargo, vaticinan que "más pronto que tarde", con la fuerza que da la amplia mayoría demócrata en las dos cámaras legislativas de EEUU, Obama "tomará riesgos" y abogará por la adopción de una agenda más "audaz".
Los analistas desglosan los diferentes frentes en los que se moverá el nuevo dirigente estadounidense en política exterior. Respecto a Israel prevén que la postura de Obama será centrista y políticamente no comprometida, muy similar a la actual, aunque es de esperar que dedique a este asunto una atención mayor que la Administración saliente.
Aunque desde el primer día de su mandato, Obama tendrá que afrontar con decisión la salida de la crisis económica y la solución a dos guerras largas y enquistadas (Iraq y Afganistan), más tarde serán cuatro los asuntos que exigirán su dedicación y a los que les dará prioridad, según los expertos.
Entre ellos se encuentra: la guerra y el deterioro de la seguridad en Afganistan y Pakistán, el delicado y complejo proceso de retirada de las tropas estadounidenses de Iraq, la necesidad de afrontar de forma diferente y más efectiva el desafío de Irán y el reto de idear un plan para conseguir que el proceso de paz entre Israel y Palestina experimente un avance real.
LIDERAZGO MORAL
En lo que coinciden los analistas es en que los EEUU deben recuperar el liderazgo moral en el mundo, perdido después del 11 de septiembre de 2001, durante la Administración Bush, en especial con sus intervenciones en Afganistán e Iraq.
"Del miedo que han provocado y provocan en la sociedad internacional, incluso en sus aliados europeos más próximos, deben pasar a ser una cara más amable para afrontar los riesgos colectivos en la seguridad", señala uno de los artículos de TEMAS.
Para corregir esta tendencia, las propuestas pasan porque los EEUU establezcan una nueva alianza estratégica con Europa, que signifique un cambio en la jerarquía dentro de los principales puntos de la Agenda Transatlántica.
Otra de las conclusiones que deberá aprender la diplomacia estadounidense es que fracasada la utilización de la fuerza militar en Afganistán e Iraq, "la única forma eficiente para combatir el terrorismo islámico es eliminar los caldos de cultivo en donde crece el reclutamiento de los grupos radicales islámicos".
En resumen, la relación de la Administración Obama y el sistema internacional, responderá, en gran medida, al mantenimiento o no de la clásica estratégia de la "contención" sobre problemas delimitados y espacios geográficos concretos.
(SERVIMEDIA)
25 Dic 2008
A