Perucho, que desarrolla su actividad en The Burnham Institute, La Jolla Cancer Research Center de California, explicó que la técnica genética permite detectar si existe un gen mutado tansmitido hereditariamente que transmita el riesgo de desarrollar un cáncer.

A pesar de este avance, el experto español indicó que la detección no supone que se pueda aún diagnosticar de manera precoz esta enfermedad, aunque en estos momentos se está trabajando en un diagnosis molecular que puede llevar a los médicos a detectar alteraciones antes de que el tumor se forme.

En este sentido, Perucho manifestó que, a través del desarrollo de la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PFR), se están desarollando técnicas que permitirán detectar alteraciones moleculares en los fluidos antes de que el tumor sea visible.

Esta línea de investigación trabaja en la detección de estas mutaciones en las oncogenes a través del plasma sanguíneo, la orina o las heces, pero aún está en fase de desarrollo técnico.