Tras conocerse la noticia de la detención de los presuntos autores el secuestro y posterior asesinato de Anabel los vecinos de Pantojase manifestaron su repulsa por el crimen en una concentración espontanea ante el domicilio de los detenidos donde se encontraban los cuatros hijos del matrimonio de entre 5 y 17 años de edad al cuidado de la madre de Felisa, Rosa Campuzano.

En esa concentración se oyeron gritos amenazantes contra la familia y advertencias de que se iba a matar a los hijos de la pareja detenida. Los vecinos lograron realizar su protesta frente a la casade la familia Muñoz a pesar de que la calle estaba cortada porque el encierro previsto a causa de las fiestas pasa por las inmediaciones de la zona.

El alcalde de la localidad toledana asegura que sólo sabe de esos acontecimientos lo que vió por televisión. "Estamos en fiestas y sólo pasé por allí ayer por la mañana. Eso ocurrió por la tarde y yo no estuve presente".

Alonso cree que los familiares de Emilio y Felisa no tienen nada que temer. "Todos en el pueblo están muy nerviosos, hablan mucho ydicen, malas cosas pero aquí nadie va a pasar a la acción, la familia no está en peligro".

A causa de este convencimiento, el alcalde de Pantoja no ha creido necesario establecer un dispositivo de seguridad en torno al domicilio del matrimonio detenido.

En la pequeña localidad toledada de 2.037 habitantes los vecinos "están de mal humor" y critican la instalación de foraneos en el pueblo (la familia Muñoz se trasladó allí desde fuenlabrada hace casi cuatro años).

El alcalde, sin embargo, cre que "lo mismo que viene gente mala viene gente buena y no se puede decir que todos los de fuera sean gentuza". Cuando terminen las fiestas, la próxima semana, el edil reunirá a los concejales para explicarles todos los extremos de la operación policial que conoce.