Durante una rueda de prensa en la que anunció los principales objetivos de su departamento para 2003, la ministra dijo que "estamos en la buena vía" y "con buenas perspectivas" para lograr una mejora de las relaciones con Marruecos.

Prueba del buen clima existente habló de la "generosa solidaridad" que ha mostrado el monarca Mohamed VI al ofrecer los caladeros de su país a los pescadores gallegos tras la catástrofe del "Prestige".

Ahora, indicó qu el retorno de los embajadores de ambos países es un "hito importante" en ese objetivo de acabar con las tiranteces entre las dos naciones, pero ello se hará "sin forzar situaciones ni tomar compromisos de fechas" todavía.

Preguntada por las decisiones que hacen falta para alcanzar la normalización total de relaciones, Palacio contestó: "Falta decisión política. España la tiene y espero que Marruecos también la tenga, porque hay que abordar asuntos acuciantes como la inmigración, ya que hay vidas humaas que se pierden todos los días en el Estrecho".

En cuanto al Sahara, señaló que la posición española no ha cambiado en las últimas fechas y está pendiente de que el norteamericano James Baker presente su informe.

COMITE TERRORISMO

En su encuentro con los medios de comunicación, la jefa de la diplomacia española reiteró el deseo de España de presidir el comité internacional contra el terrorismo existente en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU, aprovechando su condición este año de miembo no permanente de este organismo.

La ministra explicó que España tiene demostrado su "saber hacer" en materia de lucha contra el terrorismo, que es "la primera prioridad" del Gobierno, y quiere por eso estar en la vanguardia de ese capítulo en el seno de Naciones Unidas.

Palacio también dijo que a lo largo de 2003, el Gobierno promoverá en el Consejo de Europa un convenio material de definición común del terrorismo. "Es importante", indicó, "que el terrorismo se pene de un manera homogénea en lo Estados de nuestro entorno".