Durante el XVI Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte y ABC, el gobernador apuntó que las entidades "deberían seleccionar con mayor cautela" a los clientes a los que prestan dinero.

No obstante, Fernández Ordóñez indicó que las entidades "deben evitar imponer reglas indiscriminadas entre clientes en lo relativo a la concesión de financiación".

En cuanto a la morosidad, el gobernador dijo que, "en el corto plazo, persistirá en su aumento, por lo que la presión de las provisiones para insolvencias crediticias seguirá siendo elevada".

El incremento de la morosidad "persistirá en los próximos trimestres", algo que "es un riesgo que las entidades de depósito deben gestionar con mucha cautela" pues se traduce en el "debilitamiento paulatino de las cuentas de resultados de las entidades de crédito.

Por su parte, sobre la evolución del crédito, Fernández Ordóñez indicó que "no es descartable que la desaceleración prosiga, e incluso que se observen tasas de variación nulas o negativas".

Además, a medio plazo "no cabe esperar que se recuperen ritmos de expansión tan elevados como los registrados en los últimos años" en la concesión de crédito.

Para el gobernador, el proceso de desapalancamiento que está experimentando el sector bancario "no es un fenómeno pasajero, sino encaminado a alcanzar unas posiciones de endeudamiento más bajas y sostenibles".

Una posibilidad para compensar los menores ritmos de expansión del crédito, y con ello el previsible estrechamiento del margen de intereses, sería, según Fernández Ordóñez, "diversificar la actividad bancaria hacia nuevos segmentos de negocio", algo que debe hacerse con "cautela".