AI señala que es cierto, como dice Aznar, que ETA no respeta los derechos humanos y que también es preciso condenar "las amenazas e intimidaciones que supone la llamada 'kale borroka', llevada a cabo por grupos del entorno de ETA contra amplios sectores de la población".

Sin embargo, AI afirma que "no hay un mensaje claro del gobierno para no tolerar la tortura en las comisarías y entros de detención. No puede existir ese mensaje cuando se indulta, e incluso se condecora, a policías y guardias civiles que habían sido condenados por este grave delito".

A este respecto, señala que "el Comité para la Prevención de la Tortura de Naciones Unidas reflejó en su último informe denuncias de malos tratos que provenían de las prisiones de Soto del Real (Madrid) y Salto del Negro (Las Palmas de Gran Canaria)".

Asimismo, AI afirma que "continúa el aumento de las denuncias de malos trats o tratos inhumanos y degradantes a extranjeros por parte de miembros de distintas fuerzas de seguridad. Se han documentado casos al menos en Ceuta, la frontera con Marruecos, Campo de Gibraltar, las Islas Canarias y Barcelona".

AI también hace referencia a que "en muchas ocasiones no se respetan los derechos de los solicitantes de asilo", como pone de manifesto, a juicio de esta organización internacional, el hecho de "tenemos constancia de personas cuyo caso ha sido rechazado en España y que, sin ebargo, han encontrado refugio en otros paises europeos posteriormente".