AI hizo esta petición en rueda de prensa, en la que informó de la visita de 10 días que ha realizado una delegación suya a Ceuta, Melilla, Nador, Oujda y Tánger para recabar información sobre los asaltos de inmigrantes a las vallas de las ciudades españolas en el norte de Africa y las muertes de 11 extranjeros en ese perímetro fronterizo.

Javier Zúñiga, jefe de la misión de investigación, denunció los malos tratos que la Guardia Civil y la Gendarmería de Marruecos han propinado a inmigrantes subsaharianos que han intentado entrar en España.

Zúñiga recalcó que las muertes y los malos tratos a los inmigrantes tanto en España como Marruecos deben ser esclarecidas para que "no se siga actuando desde la impunidad".

Por su parte, Virginia Alvarez comentó que España ha incumplido la Ley de Extranjería, así como diversos convenios internacionales al "no respetar" derechos fundamentales de los inmigrantes, como el derecho a asistencia letrada, el derecho a solicitar asilo o la no devolución a un país que no respeta los derecho humanos.

Philip Luther, investigador de AI para Marruecos, denunció la misma situación en el país vecino, donde no se facilita asistencia letrada a los inmigrantes, no se pueden apelar los expedientes de expulsión, ni se les informa sobre las solicitudes de asilo.

Francisco Etxeberría, médico forense de esta misión, alabó la atención de los médicos de Melilla a los inmigrantes heridos en los asaltos de la valla, pero denunció que alguno de éstos han sido devueltos a Marruecos con la hoja de urgencias en blanco, lo que supone, según dijo, una irregularidad.

Finalmente, Arrah-Mary Magadelene, hermana de un inmigrante fallecido la madrugada del pasado 29 de agosto en la frontera de Melilla, apeló al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para que investigue lo que calificó de "asesinato" de su hermano por parte de un guardia civil.