La organización humanitaria presentó hoy en Madrid el informe "Estados Unidos, la ejecución de personas con efermedades mentales", que destaca que entre el 5 y el 10% de los 3.400 presos que están en el "corredor de la muerte" actualmente padecen enfermedades mentales graves.

El dicector de AI en España, Estebán Beltrán, subrayó en rueda de prensa que "en Estados Unidos, centenares de personas con enfermedades mentales graves están a merced de un sistema de salud demasiado lento para prestar ayuda y de un sistema de justicia demasiado rápido a la hora de dictar sentencias de muerte".

Beltrán calificó de "vergüenza" este informe, que también incluye un apéndice con el caso de 100 presos ejecutados en Estados Unidos desde 1977 y que sufrían algún tipo de de enfermedad mental.

El director de AI relató cómo en algunos procesos "hubo serias dudas sobre la aptitud del procesado para ser juzgado: si entendía realmente la naturaleza y la gravedad de las actuaciones que se seguían contra él o tenía capacidad para colaborar en su defensa".

También comentó casos de ejecuciones donde hubo una inadecuada representación legal, que impidió que los jurados conocieran la existencia o el alcance del problema mental del acusado.

Por su parte, el doctor en Psicología Carlos Beristain calificó de "despropósito" la ejecución de reclusos con enfermedades mentales y citó el caso de lo esquizofrénicos, "queno pueden defenderse".

Además de denunciar la "falta de rigor" de los procesos judiciales contra los reclusos con enfermedades mentales, Beristain destacó el impacto en la salud mental que tiene el estar recluido en el corredor de la muerte.

María del Pozo, portavoz de AI-España, explicó, por su parte, que en la página en Internet "www.actuaconamnistia.org" se puede firmar la campaña dirigida al fiscal general de Estados Unidos, Alberto Gonzales, para que no se condene ni ejecute a ninguna persona con enfermedad mental grave.

Del Pozo citó datos de la prensa de Estados Unidos que señalan que la ejecución de un preso en el "corredor de la muerte" cuesta 2,3 millones de dólares, que, según dijo, "se podrían destinar a otras prioridades".

Finalmente, la portavoz de AI-España señaló que para la organización sigue siendo "prioritario" la abolición de la pena de muerte en Estados Unidos, China, India, Arabia Saudí y Vietnam.

No obstante, aclaró que esta campaña es un primer paso para lograr que Estados Unidos no ejecute a los presos con enfermedades mentales, después de que ya aboliera la ejecución de menores de edad y discapacitados intelectuales.