Los dos objetores comenzaron a cumplir el servicio militar en septiembre de 1990. En enero de 1991 abandonaron elservicio, cuando fueron destinados a las corbetas "Infanta Elena" y "Vencedora" para participar en las expediciones enviadas a la zona del Golfo Pérsico.

Ambos objetores sobrevenidos manifestaron en rueda de prensa su oposición a participar en el citado conflicto militar "por motivos de conciencia".

El pasado 4 de abril se presentaron voluntariamente en el Gobierno Militar de Barcelona, donde fueron detenidos y enviados a la prisión militar de Cartagena, donde esperan ser juzgados.

AI considra que el ejercicio del derecho a la objeción de conciencia no puede ser restringido temporalmente, mientras que la legislación española impide ejercerlo durante el periodo de incorporación a filas. Por este motivo, la organización ha adoptado a varios españoles como presos de conciencia durante los últimos años.

Amnistía Internacional investigó los casos de Manuel Blázquez y José Antonio Escalada antes de determinar su adopción como presos de conciencia, al considerar que han sido detenidos por el ejrcicio pacífico de su derecho a ejercer la objeción de conciencia.

Grupos de AI de diferentes países han solicitado al Gobierno español que los objetores sean puestos en libertad de forma inmediata e incondicional. En este momento son los dos únicos presos de conciencia adoptados en España.

"ES INSUFICIENTE"

Por su parte, Juan Carlos Rois, abogado del Movimiento de Objeción de Conciencia (MOC), declaró a Servimedia, a título personal, que este reconocimiento le parece una decisión acertada, per insuficiente, ya que otros cinco jóvenes españoles que están en la misma situación no han sido reconocidos como presos de conciencia.

"Dentro de los objetivos de promoción de los derechos humanos que se marca AI, era lógico que a la gente que ha sido encarcelada por negarse a participar en una guerra, que es por definición el momento en que se niega toda la posibilidad a los derechos humanos, se le reconozca como presos de conciencia", manifestó el letrado.

Rois recordó que otros cinco jóvenes, ue no han sido reconocidos por Amnistía Internacional, "se hallan encarcelados por negarse a acatar la legalidad que les impone el ir obligatoriamente a los ejércitos".

"Esto me produce un entristecimiento", señaló, "porque demuestra que AI no ha querido arriesgar su posición sobre la polémica Ley de Objeción de Conciencia".

Rois criticó la legislación vigente en el Estado español, "que castiga de una manera represiva e inconcebible lo que es el derecho fundamental de las personas de decidir sobr la manera de participar en la defensa de su país".

Por último, manifestó que tanto la Ley del Servicio Militar como las leyes de la objeción de conciencia y de prestación social sustitutoria no son sino "normas represivas de las aspiraciones de paz de la juventud y de todos los españoles".