AI defendió, en un comunicado, el derecho de todas las personas a no ser discriminadas en razón de su orientación sexual o identidad de género y añadió que la prohibición de dicha discriminación constituye un principio reconocido internacionalmente que se aplica a toda la amplia gama de derechos humanos que los Estados deben garantizar.

Esteban Beltrán, director de la Sección Española de AI, afirmó que "el matrimonio civil entre personas del mismo sexo es un tema en el que se ponen en juego cuestiones fundamentales de derechos humanos".

"Negar a las parejas del mismo sexo reconocimiento civil en pie de igualdad impide a muchas personas el disfrute de un amplio rango de otros derechos, y estigmatiza tales relaciones en forma tal que alimenta la discriminación y otros abusos en contra de los derechos humanos de las minorías sexuales", dijo.

Finalmente, AI expresó "su profunda preocupación ante las declaraciones públicas con alto contenido discriminatorio y homofóbico realizadas por ciertos cargos públicos y algunas autoridades eclesiásticas" durante la tramitación de esta ley en el Parlamento.