"La posición de España es muy moderada en el sentido negativo. No ha dicho prácticamente nada. Piensan en los intereses económicos, las relaciones con las empresas, con el Gobierno chino, pero también es el momento de los principios", indicó Beltrán en declaraciones a Onda Cero recogidas por Servimedia. "Esperamos que el resto de países de los deportistas no les pongan cortapisas para que expresen sus opiniones".

Manifestó que "debe permitirse que los atletas ejerzan su libertad de expresión" y consideró que "las declaraciones del Comité Olímpico Español (COE) prohibiendo hablar de política son inaceptables. Han ido mucho más allá que el Comité Olímpico Internacional. Ellos sólo hablaban de sedes olímpicas y el español ha dicho que no se puede escribir en los medios de comunicación".

CONSPIRACIÓN DE SILENCIO

Por ello, consideró que "la iniciativa de unos atletas para hablar de derechos humanos ayuda a romper la conspiración del silencio en la que se ha instalado la comunidad internacional. Dicen que hablan en privado con China, pero eso no ocasiona mejoras, sino todo lo contrario".

El responsable de AI en España denunció la situación de los derechos humanos y comentó que, "de momento, los JJOO en Beijing sólo han servido, en derechos humanos, para que haya decenas de miles de personas reeducadas por el trabajo limpiando las calles de mendigos, taxistas, vendedores ambulantes y activistas de derechos humanos".

A su juicio, "la censura se ha incrementado, en el acceso a Internet sigue siendo importante; los visitantes extranjeros tienen instrucciones de las autoridades chinas de no poder llevar materiales 'peligrosísimos', como dvd, hay decenas de periodistas encarcelados... Tenemos que conseguir que la comunidad internacional hable en Pekín de derechos humanos y no sólo de deporte".