Los socialistas piden además al Ejecutivo que estudie cada año la distribución del uso del tiempo para hacer visible la relación entre las actividades remuneradas desempeñadas por los hombres y mujeres de España y las que no lo son.

Ese estudio valoraría el trabajo doméstico, el cuidado de las personas, las labores rurales, las tareas en empresas familiares, y el voluntariado, de los siete millones de mujeres que cuidande los once millones de hogares españoles, para incluirlo en las "cuentas satélites" de las cuentas nacionales del PIB.

Finalmente, instan al Gobierno a promover políticas para que la acción de distintos ministerios valore de forma efectiva la contribución del trabajo no asalariado en nuestra sociedad y tenga en cuenta sus implicaciones en el bienestar de la población.

En una rueda de prensa y acompañada por varias representantes de la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Conumidores y Usuarios (CEACU) y de la Red internacional "Las mujeres cuentan", la diputada Elvira Cortajarena defendió estas medidas para "sacar de la invisibilidad social" el trabajo de las amas de casa que se dedican de forma "exclusiva y excluyente" a cuidar su hogar y su familia.

OCHO HORAS DIARIAS

Según datos de diversas organizaciones de mujeres de base, incluir el trabajo doméstico de las amas de casa españolas duplicaría el PIB, ya que las mujeres trabajan 30 horas más que los hombres y son el80% de los voluntarios en ONGs. Además, el cuidado del 90% de los discapacitados, personas mayores o enfermos, recae en familiares del sexo femenino.

A cambio del 5% del salario mundial y del 1% de los bienes, las mujeres de todo el mundo realizan las dos terceras partes de las tareas y producen el 80% de los alimentos básicos en Africa y el Caribe.

Datos obtenidos a partir de encuestas elaboradas por CEACU, indican que las amas de casa dedican una media de ocho horas diarias a las tareas doméstias, que aumentan según el número de hijos. La mayoría de ellas valora altamente su trabajo, pero piensa que la sociedad no lo aprecia.

En muchos casos, las mujeres dejan su trabajo al casarse y un 59% se muestra categórica al afirmar que su marido le ayuda poco o nada en las tareas del hogar.

Según un estudio realizado en Vizcaya por la cooperativa vasca Eroski en 1988, el sueldo medio de las amas de casa, de acuerdo con la retribución correspondiente por horas, sería de 94.223 pesetas al mes, qu supondrían actualmente 120.000 pesetas mensuales.

En su exposición de motivos, los socialistas recuerdan las resoluciones de distintos organismos internacionales desde la década de los ochenta para que los Estados reconozcan y valoren este trabajo, y destacan las medidas aprobadas por la Conferencia de Pekín de septiembre de 1995, suscritas por el Gobierno español.