En declaraciones a la Cope, Ramallo insistió en que "cualquiera sabía que el `recetazo'no se podía hacer por dos razones: una, porque no es justo ponerles a los pensionistas cien pesetas por receta, y, segundo, porque políticamente era infumable, por lo tanto no se podía hacer. No hay que hacer cosas que n se pueden hacer y eso es lo que está deteriorando, porque se están tomando medidas importantes".

Aún así, el diputado del PP sostiene que "Aznar todavía no me ha decepcionado. Creo que mi presidente, que es muy frío, no sería malo que le imprimiera un poco más de cariño a sus acciones con la gente que tiene alrededor. De Federico Trillo prefiero no hablar. Era muy amigo suyo y cuando digo era, es era".

El Grupo Popular, según Ramallo, está esperando "un giro de timón", sobre todo "en la presentaión pública de la acción de gobierno, que eso se comunique a la sociedad".

"Lo que ha pasado en estos días me ha supuesto un revulsivo en mi conciencia de hombre que quiere que gobierne su partido y que cree que las cosas no se están haciendo adecuadamente", sostiene.

El parlamentario popular asegura que no quiere ser crítico, pero a veces las circunstancias le ponen en esa posición. Y añade: "voy a seguir diciendo en cada momento lo que deba decir y si este partido en el que estoy eso no lo entinde, es que yo sobro en el partido".

Afirma también que no le han puesto "un bozal" y advierte a quien lo intente que "se equivoca".

"Lo único que hice fue manifestar algo que es obvio, que es que si es cierto lo que se ha dicho de Eduardo Serra, se tenía que ir, cosa que cuando hable con el propio Serra me dijo que eso era así y que yo tenía razón", explicó Ramallo.

BARRERO, "INCREIBLE"

El diputado del PP rechaza que su partido no acepte la autocrítica, "y hay cosas increíbles, porque he eído que el presidente del Senado ha dicho que tanto Vidal Quadras como yo, y nos mete en el mismo saco de críticos, teníamos que haber manifestado en el Comité Ejecutivo nuestras discrepancias. No sé si cada vez que me llamen de una emisora voy a tener que esperar al primer Comité Ejecutivo que haya para saber qué es lo que puedo hablar".

No obstante, Luis Ramallo asegura que no se lleva mal con el presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero. "Lo que ocurre es que Barrero tiene un gran cargo y va a pner su gran formación al servicio del Senado".

"El próximo domingo", adelantó hoy, "se celebrará el congreso regional (del PP) en Extremadura y yo seré de los que le apoye con mi voto. Está ante un gran reto: es presidente del Senado, le apoya el presidente del Gobierno y su misión es ganar a Rodríguez Ibarra. Nunca nadie lo ha tenido tan fácil ni tan favorable en Extremadura".