En una entrevista que hoy publica el diario "El País", recogida por Servimedia, Alonso señala que el contingente desplegado por España va "a una misión que tiene riesgos, que es difícil y complicada, no nos llamamos a engaño, pero son los riesgos propios de una operación de paz en una zona compleja".

En este sentido, afirma que la misión que lleva a los soldados españoles a Oriente Próximo es "sin duda" una "operación de mantenimiento de la paz". "Y no lo digo sólo yo", sostiene. "Lo dice expresamente la resolución 1701 del Consejo de Seguridad y lo dice el propio secretario general de la ONU, que es el más autorizado para interpretarla".

En cuanto al papel concreto de nuestras tropas, el ministro dice que esta tarea fue fijada claramente por la ONU y consiste en "ayudar al Gobierno de Líbano a extender su autoridad al sur del país".

A este respecto, añade que el objetivo de los efectivos desplegados por España no es desarmar a Hezbolá, porque así se estaría "rompiendo la neutralidad y frustrando de raíz la naturaleza de la misión".

REGLAS DE ENFRENTAMIENTO

En cuanto a las "reglas de enfrentamiento" que seguirán las tropas , el titular de Defensa explica que éstas "son suficientes para garantizar la autodefensa de los soldados de Naciones Unidas y cumplir la misión".

En concreto, preguntado por qué harán los soldados españoles si se lanzan cohetes sobre Israel, Alonso señala que "el Ejército libanés va a poner 15.000 soldados y la ONU entre 12.000 y 13.000 en un territorio muy reducido, menos de la mitad de la Comunidad de Madrid. Por tanto, yo creo que van a ser capaces de mantener la paz, que la misión va a salir bien, que el objetivo es claro y las reglas de enfrentamiento suficientes".

Al mismo tiempo, el ministro dice estar totalmente de acuerdo como Javier Solana, representante de la Política Exterior de la Unión Europea, en cuanto a que "Hezbolá tendrá que elegir entre ser un grupo terrorista o un movimiento político".

Por otra parte, en cuanto a las actuaciones en Afganistán, el titular de Defensa señala que "la operación en Afganistán es dura y con riesgos, pero debe mantenerse el esfuerzo".