ROQUETAS

ALONSO ANUNCIA LA REVISIÓN DEL PROTOCOLO DE ACTUACIÓN DE LAS FUERZAS DE SEGURIDAD CON LOS DETENIDOS

- Explica que el teniente "llevaba la iniciativa" en la reducción de Martínez Galdeano y pidió a otros agentes que dejaran la calle "limpia de mirones"

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Interior, José Antonio Alonso, anunció hoy la revisión de los protocolos por los que se rige la Policía Nacional y la Guardia Civil ante los detenidos.

Alonso hizo este anuncio en su comparecencia ante la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados para explicar la muerte de un detenido, Juan Martínez Galdeano, en el cuartel de la Guardia Civil de Roquetas de Mar (Almería).

El ministro reiteró que el comportamiento de las fuerzas de seguridad con los detenidos es, en general, "bueno", pero reconoció que en este ámbito, como en todos, "siempre es posible mejorar".

Tras detallar la información de la que dispone sobre este caso, Alonso reiteró que el Gobierno no retrocederá "un milímetro" en la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos.

La política del Ejecutivo, aseguró, es "tolerancia cero" ante cualquier irregularidad que pueda cuestionar esos derechos, y que será siempre investigada "rápida y certeramente", exigiendo las responsabilidades pertinentes.

RELATO DE LOS HECHOS

Alonso detalló la cronología de lo sucedido y de la llegada de información desde que Juan Martínez Galdeano acudió al cuartel hasta que llega a Madrid un informe de la Comandancia de Almería.

Aunque anteriormente no se habían apreciado indicios de "extralimitación" ni de "uso irregular de medios", en ese informe se da cuenta de la aparición de esos posibles indicios tras el visionado de las cintas de las cámaras del cuartel.

Ese visionado demuestra que el detenido estaba esposado mientras era trasladado por cuatro agentes que tratan de reducirlo "en el suelo del patio" tras haber sido agregidos por Martínez Galdeano.

Mientras esos cuatro agentes trataban de reducirlo, apareció vestido de paisano el teniente con una defensa telescópica y otra eléctrica, y las emplea contra el detenido, que responde con "patadas y movimientos bruscos".

El detenido es después "arrastrado" fuera del campo de visión de las cámaras, un detalle que el teniente no había mencionado anteriormente.

EXPEDIENTE DISCIPLINARIO

A raíz del visionado de estas cintas, el director general de la Guardia Civil abrió expediente disciplinario al teniente, que es apartado de sus funciones de forma cautelar tres meses.

La investigación permitió tener acceso después a esas imágenes en principio no visionadas. En ellas se ve al detenido en el patio, esposado y con las manos por delante, "vestido sólo con ropa interior".

Esas imágenes demuestran los golpes del teniente al detenido durante dos minutos, con al menos siete golpes con cada una de las porras y se observa también una mano femenina que le golpea en las piernas.

El ministro explicó que en esas imágenes el teniente "lleva la iniciativa" y los demás agentes se limitan a "observar", hasta que el teniente emplaza a algunos de los agentes a curarse las heridas y a "dejar la calle limpia de mirones".

Las cámaras indican que eso sucedió a las 17,18 horas de la tarde del día 26 de julio y el equipo médico llegó a las 17,43, sin que haya imagenes de los sucedido durante el tiempo transcurrido entre ambos momentos.

Los informes oficiales indican que los agentes se percataron de que al detenido le bajaban las constantes vitales y que los equipos médicos nada pudieron hacer para reanimarle, explicando que su muerte se pudo deber a parada cardiorrespiratoria, tal y como decía también el primer informe de la autopsia.

(SERVIMEDIA)
11 Ago 2005
CLC