El suceso ocurrió ayer, después de que la madre fuera ingresada a primeras horas d la tarde en estado muy grave en la Unidad de Cuidados Intensivos, donde falleció poco después.

Los facultativos, al comprobar que estaba embarazada y que el feto vivía, realizaron urgentemente una cesárea que se llevó a cabo a las cinco de la tarde, dos horas después de haberse producido la muerte de D. D. M., lo que salvó la vida del bebé, que nació con 1.450 gramos de peso.

Tras su nacimiento, ingresó en la UCI pedriática y precisó respiración asistida. Aunque su estado es grave, los doctores o temen por la vida del pequeño.

Por otra parte, tras conseguir recuperar con vida al niño, los familiares decidieron donar los órganos de su madre, lo que se puso en conocimiento del centro de Coordinación de Trasplantes.

La extracción de los órganos se efectuó durante la pasada madrugada por un equipo médico del hospital Reina Sofía, de Córdoba, y varios especialistas de la residencia sanitaria Torre Cárdenas. Los pulmones e hígado fueron enviados al hospital Reina Sofía, mientras que los riñons los recibió el hospital Carlos Aya de Málaga.