La iniciativa la acordó la Junta Local de Seguridad que preside el alcalde y de la que, asimismo, forma parte el gobernador civil. Las fuerzas de seguridad del Estado y la Policía Municipal también contaron con representación.

"Hemos acordado que la Guardia Civil realice controles en distintos puntos y en el extraradio de la ciudad, lo que permitirá dsuadir a los delincuentes y dificultar el paso de aquellos que nos llegan dispuestos a hacer el agosto", explicó.

Asimismo, una actuación conjunta del Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil y Policía Local, tratará de controlar e investigar la compraventa de viviendas concedidas por la Administración, especialmente el MOPU, que se registra en barrios periféricos de Almería.

Según el alcalde almeriense, los usuarios ponen sus casas a la venta ilegalmente, de modo que, en reiterados casos, las aquieren personas foráneas de conducta irregular, que se asientan en la ciudad.

La Junta Local de seguridad también acordó la aplicación de una serie de medidas coordenadas, entre las que figuran la recuperación de la Policía de Barrio.

Ese nuevo cuerpo permitirá el patrullaje a pie de efectivos de la Policía Municipal y Cuerpo Nacional de Policía, tanto en los barrios como en el centro de la capital.

Por tal motivo, el ayuntamiento organizará unos cursillos de especialización entre la plantila de la policía local, puesto que las misiones de esos agentes no serán exclusivamente represivas, sino de orientación y guia al ciudadano.

Finalmente, Fernando Martínez anunció una próxima reunión con el gobernador civil, el presidente de la Audiencia y fiscales, con el fin de "valorar con ellos" la situación que sobre seguridad ciudadana presenta Almería actualmente.

"Es necesario llegar a un procedimiento que lleve a una disuasión permanente de la delincuencia", concluyó el alcalde de Almería