“El Gobierno y el señor Puente se toman como una broma el hecho de que se tarde hasta cuatro horas en llegar a una ciudad situada a poco más de 100 kilómetros de Madrid”, lamentó García, tal y como sucedió ayer domingo 28 de julio, con el tren procedente de Miranda de Ebro, o el “absoluto caos ferroviario” vivido hace una semana.

Además, la dirigente popular se hizo eco de las reclamaciones de los viajeros, “desesperados ante el terrible funcionamiento de la línea, las continuas averías en los trenes de Renfe y el caos ferroviario de Adif”.

En palabras de la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, “no es de recibo que muchos viajeros obtengan como única solución esperar más de dos horas sin ningún tipo de información, o se arriesguen a una sanción si deciden subirse a otro tren para poder llegar a Ávila”.

Por ello, desde el PP en el Senado “nos negamos a asumir el abandono del Gobierno del PSOE y sus socios, enredados en mantener en el poder a Sánchez, tapando la corrupción que cerca al presidente y su mujer, y de rodillas ante las exigencias de los independentistas, mientras ignoran al resto de españoles”.

La portavoz del GPP señaló que las tres baterías de preguntas dirigidas al Gobierno reclaman un desglose por meses del número de incidencias ferroviarias producidas en Ávila; las líneas, trenes y número de pasajeros afectados; las causas y consecuencias de cada incidencia; las medidas adoptadas para solventarlas; el número de reclamaciones presentadas por los usuarios y la cuantía de las devoluciones.

Además, preguntó en los mismos términos por los detalles del “caos” vivido el pasado 22 de julio y el retraso de ayer. “Queremos saber las causas y consecuencias de cada episodio porque provoca reacciones en cadena que multiplican el número de usuarios afectados. Personas que no consiguen llegar a sus puestos de trabajo, volver a casa o emprender sus vacaciones”, concluyó.