Rupérez señaló que "Aldaya tiene una familia impresionante, como nos lo han demostradoestos meses a todos, y un contexto laboral, el de su propia empresa, también excelente, y junto con sus amigos, podrá retornar sin demasiados traumas a la vida cotidiana".

Rupérez afirmó que, "aunque cada caso tiene sus peculiaridades, es fundamental para rehacer la vida cotidiana, la proximidad familiar y amistosa, y que el propio secuestrado se autoanalice, sepa exactamente cuál es su situación. Yo tuve la inmensa suerte de retomar casi inmediatamente mi actividad anterior, y espero que Aldaya puedahacerlo pronto".

El dirigente popular resaltó su "enorme alegría y satisfacción" por "la vuelta a casa de un hombre que tenía coartada su libertad" y recordó que "esa alegría tiene también que estar contrastada con el hecho de que Aldaya nunca tuvo que estar secuestrado, ni Aldaya ni ningún otro".

En su opinión, "ahora que nos congratulamos de su vuelta a la libertad, a casa, tenemos que hacer todo lo posible para que esto no vuelva a suceder", y no olvidar que hay otra persona secuestrada todaví por ETA en estos momentos, José Antonio Ortega Lara.

"ESTAMOS TODOS UN POCO MAS VIVOS"

Respecto al posible pago del rescate por parte de la familia, Rupérez señaló que "hoy es un día de alegrarse y no se deben mezclar esa alegría con otras consideraciones que tienen que ver con la brutalidad del terrorismo y la violencia del secuestro en si".

"Este no es el día para hablar de otras consideraciones, lo importante es que hay una persona que sigue viva y que nosotros, con ella, estamos un poco má vivos", manifestó.

Javier Rupérez coincidió con José María Aznar en que "todos los españoles hubieramos preferido que hubieran sido las fuerzas de seguridad las que hubieran recuperado a Aldaya".

A su juicio, "mientras ETA retenga la capacidad de matar y de secuestrar tendremos que seguir planteándonos exactamente las mismas cuestiones que nos llevamos planteando desde hace muchos años: cómo podemos acabar definitivamente con el terrorismo".