Reciclaje
Alcorcón contará con su propia planta de reciclaje de residuos orgánicos
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Alcorcón tendrá su propia planta para el tratamiento y el reciclaje de residuos orgánicos, gestionada por la empresa pública Esmasa, y espera poder tratar el 100% del residuo orgánico recogido durante los primeros tres años.
De esta manera, el municipio resuelve una de las principales problemáticas que rodean a la instalación del contenedor marrón en muchos municipios: disponer de infraestructura para reciclar el residuo orgánico.
La planta permite completar el ciclo de la economía circular en el ámbito del residuo orgánico, garantizando desde su recogida separada hasta su reciclaje en compost para poder darle diferentes usos. Tanto es así que, en un plazo razonable, esperan poder producir el suficiente compost como para garantizar el abono de la totalidad de los parques y jardines de la ciudad.
“Este proyecto nos permitirá tratar el 100% del residuo orgánico que recojamos durante los primeros años con el contenedor marrón. Se trata de llevar la economía circular a la práctica de principio a fin, sacando hasta 8.000 toneladas del circuito de basuras que entierra basura en el vertedero”, explicó Jesús Santos, segundo teniente de alcalde y presidente de Esmasa.
Alcorcón tiene previsto instalar el contenedor marrón para el reciclaje del residuo orgánico durante 2023. Desde la empresa pública quieren realizar un abordaje integral en esta transformación, buscando incidir sobre los diferentes aspectos que garanticen que la medida sea efectiva.
PROYECTO
Esta iniciativa ha sido diseñada por Esmasa conjuntamente con la Fundación para el Fomento de la Innovación Industrial, FFII, con sede en la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
El proyecto de la planta constará de dos fases: una piloto y otra consolidada. En la fase piloto se probarán los diferentes métodos de compost y tratamiento para ver cuál se adecua mejor a la calidad del orgánico que se recoge en Alcorcón. Una vez escogidos los métodos más efectivos, la fase consolidada sistematizará el método de tratamiento para que el orgánico recogido se recicle y no haya que llevarlo a otras plantas.
La planta tendrá una capacidad de tratamiento estimada de hasta 8.000 toneladas al año, lo que, según las estimaciones de Esmasa, será más que suficiente para reciclar el 100% del residuo orgánico recogido durante los primeros tres años.
La normativa europea es el marco en el que se ampara esta medida, centrada en darle una nueva vida al residuo orgánico para evitar que acabe en los vertederos. En este sentido, cumplirla permitirá evitar cuantiosas sanciones que repercutirían sobre las cuentas del Ayuntamiento.
(SERVIMEDIA)
18 Ene 2023
CDJ/clc