Además, la dirección está decidida a cerrar su centro de producción de La Coruña, en el que cuenta con una plantilla de 180 trabajadores, si antes del mes de junio no encuentra una alternativa industrial para esta planta.

A la rescisión de contratos hay que sumar, según el omité, la voluntad de la dirección de presentar un expediente de regulación temporal para otros 270 trabajadores del grupo Alcatel en España.

En las últimas semanas cerca de 350 trabajadores de distintas factorías habían aceptado las bajas y prejubilaciones voluntarias ofertadas por la dirección, y que forman parte del plan de reducción de 800 empleos anunciado por el grupo a finales de 1994.

El comité y los sindicatos que lo componen rechazan estas medidas por considerar que forman parte de una strategia del grupo para aprovechar la reforma laboral en su beneficio y romper el modelo de reconversión consensuado hasta ahora con los representantes de los trabajadores.

Desde 1980, la dirección de Alcatel ha reducido su plantilla en más de 10.000 personas con medidas voluntarias, de manera que ésta es la primera vez que se plantean despidos.

El comité ha anunciado que se dirigirá a la Administración laboral para denunciar las pretensiones de la empresa, a la vez que prepara un calendario de ovilizaciones contra la propuesta de la dirección.

El grupo Alcatel ocupa en España más de 7.000 trabajadores y tiene centros en Madrid, Toledo, La Coruña, Málaga y Cantabria, además de los centenares de empleados que tiene ubicados en las instalaciones de la compañía Telefónica.