La muestra incluye, además del medio centenar de dibujos de Dalí realizados entre 1925 y 1926 para este proyecto que debía contar con unensayo preliminar del poeta granadino, que éste nunca llegó a escribir, algunos montajes que recrean los personajes de las ilustraciones dalinianas.

También se muestra abundante documentación de correspondencia entre los dos y José "Pepín" Bello, inspirador del proyecto, otros dibujos de Lorca, Rafael Barradas, Rafael Alberti y Benjamín Palencia, Moreno Villa, Manuel Angeles Ortíz, Pepín Bello y José Caballero, y textos y dibujos aparecidos en revistas de la época.

Según Alborch, "ésta es una buea ocasión para conocer las manifestaciones artísticas de una época muy brillante de la cultura española, en la que coincidieron en la Residencia de Estudiantes personalidades muy sobresalientes, a través de unas obras que hasta ahora habían permanecido inéditas y que han visto la luz gracias a la investigación de Rafael Santos Torroella".

"Putrefacto" era el término con el que este grupo de amigos que coincidieron en el Madrid de los años veinte denominaban todo aquello que los vanguardistas consideraan inmovilista, trasnochado o ridículo. Los dibujos de Dalí son una especie de caricaturas de personajes muy definidos de la época.

Una teoría apuntada por Santos Torroella acerca de los motivos por los que se frustró este proyecto editorial es el paulatino distanciamiento estético entre Lorca y Dalí, fundamentalmente a raíz de la amistad entre Dalí y Luis Buñuel, que se traduciría en una fructífera colaboración en películas como "Un perro andaluz", mientras que Lorca se aproximó a los otros poetas dela Generación del 27.

A la inauguración de esta exposición asistieron el propio Santos Torroella, Pepín Bello y otros residentes de la época, la hermana de Federico García Lorca, Natalia Cossío y algunos de los prestatarios de obras expuestas, así como responsables del Banco Central Hispano (BCH), patrocinador de la muestra.