Tras explicar que su departamento trata de propiciar la regulación de este sector con una "mayor homogeneidad", la ministra señaló que la dispersión -ya que cada ayuntamiento tiene su propias normas- es un problema que dificulta cumplir este objetivo.

Asimismo, destacó que regular la venta ambulante será beneficioso para el pueblo gitano, que tradicionalmente ha vivido de este tipo de comercio.

Lucas Fernández, miebro de la Comisión Ejecutiva Regional de la FSM, resaltó la importancia de la venta ambulante, que mueve en toda España cerca de un billón de pesetas anuales y unos 150.000 millones en la CAM, donde hay unas 10.000 licencias. La venta ambulante da trabajo en Madrid a unas 22.000 personas.

Lisardo Hernández, gitano y presidente de la cooperativa "Manuses", se dirigió a los asistentes al acto para señalar las necesidades que tiene el pueblo gitano de reivindicar una de las cosas que mejor ha hecho en toa su vida: vender.

Resaltó que uno de los mayores problemas de la venta ambulante es que cada ayuntamiento tiene una normas distintas, con diferentes precios de tasas, y que la población gitana representa en la actualidad sólo el 35 ó 40% del total de vendedores ambulantes, mientras en otros tiempos eran casi el 80%.

Daniel Prieto, secretario general de la sección sindical de Venta Ambulante de UGT, declaró que quieren que la FSM incorpore a su programa electoral todas las reivindicaciones del coercio ambulante, principalmente la ley de comercio interior, que regularía de una vez este sector.

UGT pidió la creación de un Consejo Regional de Comercio Ambulante, con la presencia de los ayuntamientos implicados y los sindicatos.