En el caso de Leonel Herrera, cuya ejecución está prevista para este próximo miércoles, día 15, las autoridades han desestimado paralizar la ejecución por cuestiones de procedimiento, "pese a los testimonios que indican que puede ser inocente",asegura AI.

Herrera fue condenado a muerte por el asesinato de dos oficiales de policía en 1982. Posteriormente, un abogado declaró bajo juramento que un hermano de Leonel, Raul, se confesó culpable de los crímenes y uno de sus hijos fue testigo del hecho.

Según AI, las autoridades de Texas aseguran que los testimonios sobre la inocencia del condenado son "irrelevantes" por cuestiones de procedimiento, ya que deberían haberse presentado ante los tribunales con anterioridad.

Texas cuenta en s haber con el mayor número de ejecuciones realizadas en los Estados Unidos, con 46 en los 10 últimos años. Entre los reos ejecutados, figuran tres menores de edad cuando cometieron el delito.

Amnistía Internacional recuerda en un comunicado que 346 personas esperan en Texas conocer la fecha de su ejecución, que se realiza por medio de una inyección letal.