Según la organización humanitaria, "aunque la escala de violaciones graves de derechos humanos es muy inferior a la que había durante el régimen militar, Haití sigue luchando precariamente para consolidar los logros obtenidos".

AI mantiene que la tortura y los malos tratos, las ejecuciones extrajudiciales y los homicidios en circunstancias sospechosas son aún causa de honda preocupaión, y en los últimos dos años, se ha detenido a personas por presunta conspiración contra el Gobierno, basándose en pruebas aparentemente endebles y en ocasiones sin respetar los precedimientos legales preceptivos.

Asimismo, la ONG lamenta que el actual Gobierno no apoye abiertamente la apertura de causas judiciales contra los anteriores gobernantes que cometieron violaciones de derechos humanos.

Ante esta situación, Amnistía Internacional ha pedido a los gobiernos extranjeros que ayuden a las atoridades de Haití a capturar a los autores de violaciones de derechos humanos, incluso juzgándolos en sus propios tribunales si estas personas entran en su territorio.