"No puede ser que el Gobierno apruebe e imponga unilateralmente a los trabajadores y colectivos sociales importantes medidas profundamente lesivas", dijo el dirigente sindial, que criticó al Ejecutivo por "no hacer tan siquiera el ejercicio de abordar una negociación seria con los agentes sociales".

"El mayor problema en la mesa de negociación del pacto social", a su juicio, "lo está planteando el Gobierno de Felipe González, que está arruinando todas las posibilidades de entendimiento. Las medidas que está aprobando el Gobierno sólo satisfacen a la derecha nacionalista vasca y catalana".

"Estamos asistiendo", dijo, "a una transferencia de rentas hacia el capital qe, medidas en términos de agujero fiscal, vacaciones fiscales y prebendas, estimamos del orden de los 200.000 millones de pesetas".

Según Agustín Moreno, ante esta situación los sindicatos no tienen otra alternativa que recurrir a "las movilizaciones de trabajadores". "El reloj está corriendo ya con el final puesto en la entrada en vigor de los nuevos Presupuestos Generales del Estado que el Gobierno está tratando ya de aprobar".

"Estas medidas entrarán en vigor a principios de 1994 y con esa feca tenemos que trabajar los sindicatos para llegar a tiempo para frenar esta agresión y obligar al Gobierno a hacer un cambio de orientación en la política económica".