Aguirre, que inauguró junto a Ángel Acebes y Alberto Ruiz-Gallardón la conferencia "Más seguridad, mejor convivencia" que el PP celebra este fin de semana, puso a las Bescam como ejemplo de las posibilidades que tienen las comunidades sin policia autonómica propia para "ayudar" a mejorar la seguridad.

Las Bescam aportan, con presupuesto del gobierno regional, agentes a los principales ayuntamientos de Madrid con más de 10.000 habitantes para que trabajen junto a las policías locales.

Aguirre destacó que a este proyecto se han unido "todos los ayuntamientos de cualquier signo político", incluidos algunos gobernados por el Partido Socialista y por Izquierda Unida.

La presidenta madrileña explicó que los agentes de las Bescam "no pueden poner multas de trafico, sino que se dedican a prevenir los delitos, a circular por calles y plazas y a dar esa sensacion subjetiva de seguridad que tanta importancia tiene".

Asimismo, Aguirre hizo especial hincapié en que "no existe ninguna relación entre inmigrantes y delincuentes" porque la mayoría de las personas que vienen a España es para trabajar. Los que vienen a delinquir, dijo, lo hacen "porque creen, y a lo mejor no les falta razón, que las leyes son mas permisivas y que los delitos les salen más baratos".