En una rueda de prensa en la sede federal del PSOE, Pérez Rubalcaba aseguró que su partido ha intentado llegar a un acuerdo sobre este asunto con el Gobierno, y si no se ha conseguido es porque no han aceptado "ni una sola de las propuestas" presentadas.

Además, subrayó que Tocino ha sido "incapaz" de sacar adelante un Plan Hidrológico Nacional, a pesar de que los trabajos estaban "muy avanzados" cuando el PP llegó al Gobierno.

"Diga lo que diga la ministra", dijo el dirigente socialista, la reforma aprobada hoy establece "un mercado libre del agua" al permitir que el poseedor de una concesión la pueda vender por un precio acordado entre ambas partes.

"El agua, que es un bien público, después de esta ley pasa a ser un bien privado, y el que tien agua la puede vender, y el que tiene dinero la puede comprar", concluyó Rubalcaba.

En definitiva, consideró que la decisión adoptada hoy es "la prueba del nueve de que el Gobierno es incapaz de gestionar con carácter solidario y equilibrado un bien escaso como es el agua".