La facturación del ejercicio creció un 5,4% y se situó en 102.559 millones. Destaca la cifra de negocio en el exterior, que alcanzó los 27.677 millones, con un aumento del 27%.

La entrada de Ferrovial se notó especialmente en la tesorería de la constructora, que pasó de 3.777 millones a finales de 1994 a 13.108 millones en 1995, y en los fondos propios, que evolucionaron desde una cifra negativa de 10.953 millones a una positiva de 5.316 millones.

Además, Agromán ha quedado libr del endeudamiento de 1994, que era de 10.947 millones de pesetas, mientras que la deuda del grupo consolidado se situó en 28.915 millones (el año anterior no estuvo contemplada por la disolución del grupo).

Los responsables de la constructora esperan que la evolución seguida el año pasado se repita en 1996 y se logren beneficios ya en 1997. A estas previsiones contribuirá la participación de la empresa en el consorcio que realizará el tramo Málaga-Estepona de la autopista de peaje de la Costa del Sol

Agromán está ahora bajo la aplicación de un plan de reflotamiento y recuperación, tras la ampliación de capital realizada para mejorar el saneamiento de la empresa, y que ha supuesto un aumento de 12.345 millones en los fondos propios.

También ha modificado sus principios de organización, para alcanzar mayor proximidad al cliente y descentralizar la gestión. Entre las medidas adoptadas, ha estado cambiar la división vertical de la empresa, basada en segmentos de actividad, por una estructura horzontal articulada en direcciones de zona y la ampliación del número de delegaciones de 14 a 21.