De esta forma, los agricultores podrán acceder a préstamos al 3 ó al 4 por ciento de interés nominal, ya que l Administración subvencionará la diferencia hasta los tipos reales aplicados por las entidades financieras.

Estos créditos tendrán duraciones de 5 a 15 años para su amortización, y hasta tres años de carencia. Además, el Gobierno facilitará la reducción del coste del aval necesario para su concesión, hasta valores aproximados del 75 por ciento de su coste total.

También se mejoran los límites de inversión subencionable en planes de mejora, hasta un máximo de 23,2 millones de pesetas en explotacioes individuales y de un 69,8 por ciento en agrupaciones.

Asimismo, el nuevo decreto amplía en un 15 por ciento las ayudas a los jóvenes que se instalen en el campo, con un máximo total de 3,8 millones por persona, de los que la mitad se aplicarían a la bonificación de intereses y el resto, unos 1,9 millones, como subvención directa a los gastos de instalación.

Otro decreto aprobado hoy por el Consejo de Ministros modifica las ayudas a la transformación y comercialización de productos agrarios y psqueros, que pasan a ser bonificaciones de intereses en operaciones de créditos, para así agilizar el sistema, según el Gobierno.