La denuncia incluye un informe de la empresa Celtia S.A., dedicada a la tarea anti-granizo, que afirma que las principales benefiiarias de que no granice ni llueva podrían ser las compañías aseguradoras agrícolas, que propiciarían esta situación con el fin de evitar las indemnizaciones a los agricultores. AVIMON asegura que, además del Moncayo, hay otras zonas afectadas en el país por las maniobras de disipación de las nubes.

Las denuncias de este grupo de habitantes del Moncayo comenzaron hace 5 años y provocaron la apertura de una investigación por parte del Gobierno Civil de Soria, que, hace un año y medio, concluyó con un iforme que especificaba que no existían vuelos de avionetas en esa zona y que ninguna institución los había autorizado.

Asimismo, el Comisionado de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente en España, Manuel Toharia, envió a los denunciantes otro informe en el que explicaba que, para impedir la lluvia, sería necesario utilizar una cantidad de energía equivalente a la desatada por 20 bombas atómicas, por lo que el supuesto vuelo de avionetas no podría tener esas consecuencias.

Igualmente, en varia ocasiones durante estos 5 años de investigación el Centro Meteorológico Zonal del Duero insistió en la imposibilidad material de que el tráfico aéreo ocasione la sequía.

A pesar de todo, la AVIMON decidió presentar la denuncia tras ponerse en contacto con la Coordinadora de Organizaciones deDefensa Ambiental (CODA), que les respaldó y asesoró jurídicamente.

Los organimos denunciados han negado hasta la fecha cualquier implicación en estos hechos. Sin embargo, a causa de la denuncia, serán llamdos a declarar el gobernador civil de Soria, Pedro Luis Piñeiro, y la delegada territorial de la Junta de Castilla y León.