El Reglamento General de Vehículos establece que todos los turismos, independientemente de cuál sea su fecha de matriculación, están obligados a llevar dos dispositivos portátiles de señalización de peligro.

Ante la entrada en vigor de dicho reglamento, el pasado 27 de julio, se produjo una fuerte demanda de triángulos, lo que originó un desabastecimiento en los puntos de distribución que obligó a Tráfico a suavizar la aplicación de la medida.

Una vez comprobaa la existencia en la actualidad de triángulos en el mercado, Tráfico exigirá con rigor a partir del 1 de marzo la utilización de estos dispositivos, que se emplean para advertir a los demás automovilistas cuando un vehículo se encuentra parado en alguna carretera o parte del cargamento está caído sobre la misma.

Los triángulos deben colocarse uno por delante y otro por detrás del vehículo, como mínimo a 50 metros de distancia y de forma que sean visibles desde 100 metros, al menos, por los conductore que se aproximen.

En las vías con un solo sentido de la circulación será suficiente la colocación de un solo triángulo, situado detrás del vehículo en el lado de donde provenga la circulación.