Esta aportación ha tenido varias fases, comenzando antes incluso de los ataques de Estados Unidos a Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre, y se ha hecho a través de Cruz Roja, Médicos del Mundo, ACNUR y en aviones fletados directamente por la Agencia de Cooperación Internacional, todo ello en coordinación con la Unión Europea.

Para continuar con la ayuda humanitaria, Piqué dijo que el Gobierno está "a la espra de lo que realmente se pueda necesitar" y "abiertos a todo aquello que nos sea requerido".

"Lo más importante es que se organicen los canales de distribución de la ayuda", dijo el ministro, para evitar la posibilidad de que la ayuda puesta a disposición no encuentre una "capacidad real de que ésta llegue a las personas necesitadas". Piqué concluyó que cuando estén establecidos los corredores de ayuda humanitara en los que participará España informará a la Cámara.