La nueva terminal se abrirá al púlico el próximo mes de febrero y centralizará los servicios de facturación de Son San Joan.

Las obras se iniciaron en 1993 con un coste total de 21.000 millones de pesetas. El edificio podrá albergar en su interior a 17.000 personas en hora punta, con lo que se solucionará el problema de masificación de pasajeros que sufría cada verano el aeropuerto de Palma de Mallorca.

El edificio contará con un mobiliario amplio y diverso. Se instalarán 500 tumbonas de madera de teca natural maciza en el solarum, que cuenta con una superficie de 8.024 metros cuadrados.

La zona de preembarque contará con 6.000 sillas y se han dispuesto sofás, butacas giratorias en escritorios-teléfonos y mesitas auxiliares estilo Le Corbusier, de los años veinte, en las distintas salas de la terminal.

El nuevo complejo aeroportuario se completará con un edificio de servicios, que AENA recibirá el día 30 de abril con la primera fase del edificio que albergará el aparcamiento, con capacidad para 4.000 vehiculos, por un vlor global de 5.985 millones de pesetas.