Este fenómeno meteorológico se situará sobre el noroeste peninsular durante las horas centrales del día y se reforzarán las brisas mediterráneas “estableciéndose importantes convergencias en el alto y medio Ebro y zonas de montaña cercanas”. No obstante, “la incertidumbre inherente a este tipo de fenómenos hace que sea muy difícil precisar las zonas de mayor impacto”, advirtió la Aemet.

A partir del viernes, la agencia prevé la llegada de una DANA por el noroeste peninsular, “por lo que continuarán las tormentas y los chubascos, aunque se localizarán de manera más probable en el entorno de la cordillera Cantábrica, sistema Ibérico y el sistema Central”.

Durante el fin de semana, “el escenario más probable es que la DANA se desplace por el Cantábrico mientras comienza a ser absorbida por la circulación general, por lo que todavía podría haber chubascos y tormentas más probables en la mitad del norte peninsular, aunque la incertidumbre para estos días es aún mayor”, concluyó.