Esta información acerca del consumo eléctrico de cada producto, o "etiquetado energético", es uno de los principales objetivos de la campaña "Ahorrar es lo ecológico, ahorrar es lo económico", con la que Aedenat pretende fomentar un uso más eficiente de la electricidad.

"Cuando tanto se habla de ahorro energético en el nuevo Plan Energétio Nacional", dice Aedenat en un comunicado, "es sorprendente que no se haya pensado en esta medida".

La asociación ecologista ha remitido sus propuestas al Ministerio de Industria, a la Comisión de Peticiones del Congreso, a los grupos parlamentarios y a las organizaciones de consumidores.

Según Aedenat, una bombilla de alto rendimiento llega a consumir menos del 20 por ciento que una incandescente normal y dura hasta ocho veces más, por lo que su mayor precio se amortiza en menos de dos años.

Aedenat se remite a un informe de Greenpeace que demuestra que sustituyendo los equipos ordinarios eléctricos por los de mejor tecnología existente en el mercado se consiguen ahorros energéticos de hasta el 26 por ciento en el sector industrial, del 34 por ciento en los hogares y del 36 por ciento en el comercio, servicios y Administración.

TECNOLOGIAS AVANZADAS

Los ecologistas añaden que "si se utilizaran las tecnologías avanzadas, el ahorro sería aún mayor". En los equipos de aire acondicionado,por ejemplo, "utilizando la mejor tecnología existente en el mercado se pueden conseguir las mismas prestaciones con un consumo de sólo el 55 por ciento y sin gastos adicionales con respecto a los equipos ordinarios".

Sin embargo, la organización de defensa ambiental considera que "el mejor sistema de bienestar frente a los calores del verano es un aislamiento adecuado de las viviendas".

Como medida "complementaria" Aedenat apunta la reducción e incluso eliminación del llamado "término de potenci" que figura en los recibos de la luz, un canon que se paga aunque no se consuma electricidad y que aumenta con la potencia disponible.

Según los ecologistas, esta tasa de potencia "disuade del ahorro a los consumidores, ya que con independencia de los esfuerzos que hagan, la reducción de la factura en tanto por ciento será pequeña".

Una política como la propuesta permitiría, "sin elevar el coste medio de la electricidad, premiar económicamente a los ciudadanos que ahorraran más, reduciendo de pao la factura de importación de productos energéticos (uranio, carbón, fuel-oil o gas) y el tremendo impacto que siempre tiene la generación de electricidad", concluye Aedenat.