Durante su intervención en el IX Encuentro Financiero Internacional organizado por Caja Madrid, Martín puntualizó la aprobación de este fondo "en gran parte ha despejado las dudas existentes sobre la vía española del rescate bancario".

Según Martín, el propio nombre del fondo contiene la palabra reestructuración, pero "difícilmente habrá una reestructuración que sea, simultáneamente, eficaz para garantizar la viabilidad a largo plazo de una entidad y respetuosa con la igualdad competitiva, que no se instrumente como una fusión plena de las entidades afectadas".

Además, el presidente de la patronal bancaria añadió que a esta dificultad se suma el hecho de que es preciso minimizar el coste para las arcas públicas, lo que convierte a este proceso en "una tarea formidable".

"La AEB, en todo caso, reconoce el esfuerzo que están haciendo las autoridades españolas y las brinda todo su apoyo para sacar adelante un proyecto tan esencial", aseveró Martín, quien durante la elaboración del Frob no ocultó sus críticas al Gobierno porque no les consultó en ningún momento.

Para Martín, los principales retos de las entidades financieras españolas son hacer frente a una economía en recesión en 2009 y 2010 y adaptarse al Frob.

"Si esto se hace correctamente, no sólo el sistema saldrá fortalecido, sino que será un elemento decisivo para acortar la crisis e impulsar la economía", aseveró.

En este sentido, Martín dijo en relación con las crisis que "siempre que llovió, escampó" y que, aunque terminará algún día, "tenemos que prepararnos para ello". Pero "estamos demasiado absortos en el corto plazo y en la crisis presente y nos complace concentrarnos en el dolor presente, en lamentarnos de la crisis y de lo poco que los demás, en especial el Gobierno, hacen para sacarnos de ella", aseveró.

El presidente de la AEB reconoció que lo que haga el Gobierno es "fundamental, necesario y determinante, pero no es suficiente". Por ello, dijo que las empresas son las "máximas responsables" y tienen que tener la ideas claras para contribuir a la salida de la crisis.

Pero Martín criticó el exceso de endeudamiento de la economía española que "no puede solucionarse incrementando la Deuda Pública, habrá que hacer algo más".

Para finalizar, reconoció que las tres principales medidas adoptadas -inyección masiva de liquidez de los bancos centrales, el impulso fiscal y el rescate, saneamiento y capitalización de entidades- eran necesarias.

No obstante, puntualizó que, cumplida la misión de estas medidas, "su mantenimiento sería destructivo y provocaría otra crisis de dimensiones desconocidas".