Espina subrayó que las ayudas del Estado todaía no son seguras, al estarse negociando actualmente con las autoridades de la CE, que prohibe las subvenciones de carácter sectorial, por considerarlas contrarias a la competencia.

El sector textil atraviesa una profunda crisis, como consecuencia de la cual 120 empresas se declararon en suspensión de pagos el año pasado, con una deuda de 37.620 millones de pesetas, y otras 44 en el primer semestre del 91, con un pasivo de 7.175 millones.

El año pasado, la producción cayó un 2,2 por ciento y la prdida de empleo fue de 9.800 puestos de trabajo, en un sector que representa el 7 por ciento del PIB español, lo que convierte a España en la quinta potencia textil de la CE tras Italia, Francia, Reino Unido y Alemania.

RECONVERSION

Por otra parte, Espina afirmó que el programa para la reconversión industrial contará en 1992 con una partida de 69.944 millones de pesetas, 8.344 millones más que en 1991.

De esa cantidad, 19.000 millones se dedicarán a afrontar compromisos ya adquiridos y 47.000 mllones a la modernización de empresas, sobre todo del sector textil.

Espina hizo hincapié en que no se abrirá ningún nuevo proceso de reconversión e insistió en que las empresas en dificultades, tanto públicas como privadas, deberán resolver sus problemas con planes de viabilidad negociados entre sus accionistas, directivos y trabajadores.

Aseguró que las dificultades que atraviesan muchas industrias obedecen a un aumento de los costes superior a lo que pueden asumir las empresas del sector, sin undirse ante la competencia extranjera.

A este respecto, afirmó que todos aquellos que cargan sobre las empresas costes superiores a los que puedan soportar están contribuyendo a aumentar el paro, como única vía posible de ajuste.

En la Comisión de Industria del Congreso compareció también el secretario de Estado de Comercio, Miguel Angel Feito, quien explicó que el año que viene no se abrirán nuevas oficinas comerciales de carácter oficial en el exterior.

No obstante, el Instituto de Comerco Exterior (ICEX) tendrá un presupuesto de 18.000 millones de pesetas, 1.400 millones más que en este ejercicio, que se dedicarán principalmente a la formación profesional y el fomento de las redes comerciales privadas en el extranjero.