Durante su discurso en la Junta General de Accionistas de la constructora, Pérez indicó que 2008 "va a ser nuevamente el mejor ejercicio de la historia del grupo", pese a la "compleja situación de los mercados financieros".

Ello, indicó el presidente de ACS, "nos obligará a avivar el ingenio y buscar alternativas que nos permitan continuar en los niveles de crecimiento y rentabilidad" logrados hasta ahora.

En 2007, el beneficio ordinario de la compañía, sin contar con los extraordinarios, alcanzó los 1.010 millones, tras crecer casi un 24%.

El presidente de ACS también se refirió a la estrategia energética del grupo, y reiteró las palabras comunicadas a la CNMV el pasado 5 de febrero, que su objetivo es "la consolidación de un gran grupo energético español donde ACS pueda ser protagonista junto al resto de sus socios".

Este proyecto, en el que Iberdrola parece estar en el punto de mira, "siempre tendrá los condicionantes de cumplir lealmente con la política energética del Gobierno, y asegurar que la mayoría de los activos energéticos españoles estén en manos de accionistas españoles".

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