La acusación parte de los principales acreedores de Lehman Brothers. Sostienen que JP Morgan congeló 17.000 millones de dólares en efectivo y en valores que pertenecían a Lehman, justo el viernes anterior a su quiebra, el pasado 12 de septiembre.

Esa actuación de JP Morgan, según estos acreedores, es lo que habría precipitado el colapso de Lehman Brothers, que entró en bancarrota la mañana del lunes siguiente, 15 de septiembre.

Estas alegaciones han sido presentadas ante un tribunal de Nueva York encargado de procesos de bancarrota, por parte un comité de acreedores entre los que figuran muchos de los 'pesos pesados' de Wall Street, importantes bancos y aseguradoras europeas, y también entidades japoneses y chinas.

La importancia de los demandantes y el calado de las acusaciones presagia, según "The Times", una "colosal batalla legal" en los tribunales.

Estos demandantes reclaman que los tribunales encargados del caso abran la contabilidad de JP Morgan para verificar el comportamiento seguido por esta entidad financiera.

Según el documento de alegaciones, "el comité de acreedores entiende que Lehman Brothers Holding Inc. tenía al menos 17.000 millones de dólares en activos sobrantes que eran mantenidos por JP Morgan Chase durante el viernes anterior al fin de semana que condujo a la presentación de la bancarrota".

A su juicio, "como consecuencia de las actuaciones de JP Morgan, Lehman Brothers sufrió una inmediata crisis de liquidez, que pudo ser evitada" con medidas que no se adoptaron.

JP Morgan ha respondido a estas acusaciones, según el rotativo londinense, calificándolas de "conjeturas infundadas a las que haremos frente a su debido tiempo en los tribunales" encargados de los procesos de suspensión de pagos.