A través de un comunicado, la CECU recuerda que las huchas de los niños son un lugar propicio para tener guardadas decenas de monedas que sólo dentro de unas semanas perderán todo su valor.

La Confeeración de Consumidores solicitó también al Banco de España que amplíe al menos una semana el plazo para canjear las monedas, porque el último día hábil para el cambio, el 31 de diciembre, es una jornada especial de compras navideñas en la que, además, los bancos cierran por la tarde.

"El perjuicio que este hecho puede producir en los consumidores y comerciantes puede ser importante, sobre todo si tenemos en cuenta que nadie puede negarse ese día a recibir una moneda que a todos los efectos todavía esá en curso", afirma la nota.

Según la CECU, si no se habilitan más días para el canjeo, puede ocurrir que algunas personas tengan la tentación de cambiar las monedas desfasadas por otras de curso legal a los ciudadanos que estén poco avisados del cambio, o que simplemente estén de visita turística en España.