No obstante, Acerinox consigue remontar las pérdidas registradas en los tres últimos meses de 2005, que fueron de 41,8 millones.

La facturación de la compañía en este periodo mejoró un 1,7%, hasta los 1.165,68 millones de euros, mientras que el beneficio operativo cayó un 67,9%, a 40,85 millones.

Acerinox mantiene que en el mercado mundial de los aceros inoxidables se ha producido un cambio de tendencia en los meses de enero y febrero de 2006, consolidándose una importante mejora de la demanda a partir del mes de marzo.

Los precios que se están contratando en todos los mercados son superiores a los del cuarto trimestre de 2005, que alcanzaron mínimos históricos y en consecuencia, las perspectivas para el resto del año son optimistas, dice la compañía.

No obstante, la evolución del mercado de los aceros inoxidables en este ejercicio 2006 dependerá, tanto en consumo como en precios, de la evolución del precio del níquel que, debido a movimientos especulativos, ha experimentado en las últimas semanas una nueva e importante subida y se encuentra en máximos históricos.