Este es el acuerdo más palpable del primer encuentro entre la consejera catalana y Angel Acebes, que conversaron esta tarde en la sede del Minsterio de Interior por espacio de tres horas.

Al concluir la entrevista, Tura compareció ante los medios de comunicación y aseguró que este primer contacto había sido "cordial" y le había servido para hacer al ministro "un planteamiento tranquilo y sereno" de las posiciones que defiende el nuevo Gobierno catalán.

Ambos responsables de Interior analizaron el calendario para el despliegue de los Mossos en la ciudad de Barcelona. A partir de otoño de 2004, setecientos efectivos de la Policía Autonómca catalana comenzarán la sustitución del Cuerpo Nacional de Policía, un proceso que terminará en diciembre de 2005.

Estos son los plazos previstos por el Ministerio de Interior, que el Gobierno catalán no discute porque reconoce que este calendario es "muy apretado" y que la administración catalana necesita ese tiempo para tener a los policías autonómicos formados y dispuestos para tomar el relevo.

Sobre la mesa de este primer encuentro también estuvo la seguridad vial y los accidentes de tráfic, que Tura consideró un "problema gravísimo". La consejera se declaró "acérrima defensora" del carne de conducir por puntos y pidió al ministro que dé a la Generalitat la competencia de otorgar y retirar el permiso de conducir.

En definitiva, la Generalitat catalana quiere "mayor contundencia" y "castigos ejemplares" para los conductores que incurran en conducción temeraria de manera reiterada. Acebes, sin embargo, pidió a Tura que espere a ver el resultado de la aplicación de la nueva normativa de trfico que entrará en vigor en marzo próximo.

Además, Tura reclamó al ministro que agilice la aprobación de los planes de actuación diseñados por la Generalitat de Cataluña para los complejos químicos y petroquímicos que hay en la comunidad catalana, y obtuvo el compromiso de Acebes en este sentido.

Como colofón de la entrevista, la consejera de Interior aseguró que pretende mantener los canales de diálogo entre la Administración central y el Gobierno catalán en todo momento. En este sentido, reconció que el proyecto de crear un mando policial único en Cataluña no es una propuesta "para mañana ni para la próxima semana", aunque dijo confiar en que "algún día se podrá llevar a cabo, siempre manteniendo los lazos de cooperación" con el resto de cuerpos policiales.