"No es de recibo que a España se le eche en cara esta limitación, cuando otros países no han empezado las privatizaciones y sus empresas públicas pueden entrar a saco en otros países sin ningun reparo", afirmó.

Sí que admitió que el sistema de la "acción de oro" es "restrictivo" para el libre funcionamiento del mercado y que, por tanto, debe ser eliminado en el futuro, pero cuando todos los países comunitarios esténen igualdad de condiciones.

Por tanto, en las circunstancias actuales Gil consideró que es "razonable" que se mantengan este tipo de cautelas puesto que, de lo contrario, se podría producir el efecto indeseado de que una empresa privatizada fuera controlada por otra pública de otro país.

El director general del IEE, Juan Iranzo, añadió que la "acción de oro" no se debe utilizar para impedir que una compañía privada compre la empresa privatizada, pero sí para evitar "que vuelva a ser pública".