Todos ellos testificaron a lo largo de la mañana, entre las 11 y las 14,15 horas, aunque nada ha trascendido de su relato a la juez encargada del caso.

El accidente ferroviario provocó la muerte de 18 personas y casi un cententar de heridos, de los que 33 continúan ingresados en hospitales de Pamplona. Ocho permanecen en unidades de cuidados intensivos y de éstos, cinco en estado muy grave.

A la declaración judicial de los oprarios de Renfe acudieron un fiscal y un abogado de la compañía ferroviaria. Los tres citados lo fueron en calidad de testigos y no estuvieron acompañados de sus abogados. Tras sus testimonios, volvieron a quedar en libertad.

Hasta el próximo jueves, el juzgado de Instrucción número 1 no tendrá el informe de las investigaciones que Renfe está haciendo sobre el siniestro. Será entonces cuando la juez pueda conocer si el accidente fue ocasionado por un fallo en el sistema de señalizaciones de la estació navarra, por un error de percepción de dichas señales por parte del maquinista o por un problema en el cambio de las agujas.