Los hechos ocurrieron durante un concierto celebrado el 11 de septiembre de 1991 cuando, en una de las canciones del citado grupo, se hacían alusiones a la virginidad de la Virgen María y a sus relaciones sexuales con San José, profiriéndose también insultos contra la policía.

Un informe técnico de la Policía Municipal propició que el Ayuntamento iniciase acciones judiciales contra "Explosivos vino tinto", vetando también al grupo para cualquier nueva contratación.

El juez de lo penal, José Luis Rodríguez Greciano, basa la absolución, según la sentencia, en que dichas ideas fueron emitidas en el transcurso de un concierto por un grupo musical contratado por el propio Ayuntamiento y en un contexto determinado, con un público que conocía la música de los acusados y en una sociedad laica y plural.

La fiscalía había solicitado un mes y u día de arresto para los miembros del conjunto. Durante el juicio, los acusados manifestaron que su intención era criticar al estamento católico, al entender que su predicado no se corresponde con sus actuaciones.