El representante legal de los Feliu aseguró que la familia no ha negociado ni ha hablado de dinero en ningún momento con las personas que retienen a la joven.

Según las últimas informaciones, los secuestradores podrín haber pedido los 175 millones en el último contacto que mantuvieron con la familia de la farmacéutica, el pasado 29 de diciembre.

En aquella ocasión, enviaron un mensaje grabado con la voz de Maria Angels Feliu, que afirmaba llevar 25 días de secuestro.

Este hecho no fue considerado, sin embargo, una prueba suficiente para creer que la joven seguía con vida. Las investigaciones del caso se centran ahora en la posibilidad de que la farmacéutica se encuentre fuera de la comarca de la Garrotxa, a a que pertenece Olot.

Por su parte, el alcalde de Olot, Pere Macies, manifestó ayer que el móvil del secuestro parecía ser de carácter económico, al tiempo que se mostró partidario de que los familiares pudieran pagar el rescate, ya que, según dijo, la policía ya perseguiría a los autores una vez liberada la víctima.