En su polémica intervención, el presidente Montilla acusó a los dirigentes de CiU de hacerse los "gallegos", por su ambigüedad ante la reforma laboral.

Las reacciones críticas que estas palabras suscitaron en distintos sectores políticos no se hicieron esperar. El portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, exigió "disculpas" y una "rectificación" a Montilla, mientras la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, reclamó al presidente catalán que "pida disculpas también al presidente de la Xunta", Alberto Núñez Feijóo.

A través de un comunicado, Montilla afirmó este jueves que utilizó "una expresión coloquial sin ánimo de ofender a nadie" y lamentó que sus palabras "hayan podido causar malestar a ciudadanos de origen gallego", por los que expresó su "más profundo afecto y respeto".