En el encuentro informativo, organizado por Nueva Economía Fórum en Santiago de Compostela, el dirigente autonómico definió como "una distorsión del mercado" el hecho de que los productores gallegos "tengan que dejar el producto de su esfuerzo" a una industria que recoge la leche "sin concretar el precio".

Por ello, consideró que "no nos daremos cuenta de la situación" que atraviesa el sector hasta que "cierren las explotaciones", incluso en un país como España, que "consume más de lo que produce".

Así, enmarcó la necesidad de establecer precios mínimos como "una estrategia de país" tendente a "mantener un sistema productivo" que está atravesando una crisis.

En este contexto, aseguró que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino "tiene el apoyo unánime de las autonomías" para conseguir establecer los precios mínimos que la industria debe pagar por la leche.

En opinión de Feijóo, el Tribunal de Defensa de la Competencia debería "intervenir" en este asunto, pues consideró que en la misma cadena de alimentación en otros países se paga la leche "seis o siete céntimos" por encima que en España.

En relación con la posibilidad de que el sector lácteo gallego se vea obligado al cierre, advirtió de que el hecho de que franceses y holandeses marcasen el precio sería "malo para las familias y catastrófico para los ganaderos que dejarían sus explotaciones".